ROMANCE DE ABENÁMAR, ANÓNIMO (DATADO EN EL S. XV.)
“¡Abenámar, Abenámar,
moro de la morería,
el día que tú naciste
grandes señales había!
Estaba la mar en calma,
la luna estaba crecida:
Moro que en tal signo nace
no debe decir mentira."
Allí respondiera el moro,
bien oiréis lo que decía:
"Yo te lo diré, señor,
aunque me cueste la vida,
porque soy hijo de un moro
y una cristiana cautiva;
siendo yo niño y muchacho,
mi madre me lo decía:
que mentira no dijese,
que era grande villanía:
por tanto, pregunta, rey,
que la verdad te diría."
“Yo te agradezco, Abenámar,
aquesta tu cortesía.
¿Qué castillos son aquéllos?
¡Altos son y relucían!”
"El Alhambra era, señor,
y la otra la Mezquita;
los otros los Alixares,
labrados a maravilla.
El moro que los labraba
cien doblas cobraba al día,
y el día que no los labra,
otras tantas se perdía.
El otro es Generalife,
huerta que par no tenía;
el otro Torres Bermejas,
castillo de gran valía."
Allí habló el rey don Juan,
bien oiréis lo que decía:
"Si tú quisieses, Granada,
contigo me casaría;
daréte en arras y dote
a Córdoba y a Sevilla."
"Casada soy, rey don Juan,
casada soy, que no viuda;
el moro que a mí me tiene
muy grande bien me quería.”
1. Señala cuál de los recursos retóricos que hemos visto en la canción se dan en los siguientes fragmentos:
Algunos de estos fragmentos tienen varios recursos, como el caso de "moro de la morería" que puede considerarse también políptoton; o "Abenámar, Abenámar", que puede ser también reduplicación; o ¿Qué castillos son aquellos? que es también una paronomasia, como sucedía en el ejemplo de la canción.
2. Lee el poema y trata de deducir el significado de las palabras a través del contexto:
3. Ahora observa estas fotos de tres monumentos de Granada que se mencionan en el romance y trata de identificarlos.
4. A continuación escribe el verbo entre paréntesis en la forma verbal correcta:
Sitúa, eran (también puede ser "fueron"), convivían, hace, ofreció, fuera.
5. Marca la respuesta correcta respecto al contenido del poema:
6. Este romance nos habla sobre el deseo del rey Juan II de Castilla de incorporar Granada a su reino, un deseo que se muestra a través de dos diálogos. ¿Con quién o quiénes dialoga el rey?
7. El diálogo es fundamental en el romancero, ya que aporta dramatismo. Esto implica el empleo del estilo directo. Resume el contenido del diálogo con el rey Don Juan.
8. Ahora haz lo mismo con el diálogo alegórico que tiene con la ciudad de Granada.
9. El romance se inicia in media res. ¿Qué crees que esto quiere decir?
10. La aparición del narrador es muy habitual en los romances para mostrar los hechos como si el público que los escucha los estuviese viendo. ¿Puedes señalar los versos en los que se manifiesta la voz del narrador y la intención?
11. Señala los distintos tiempos verbales que aparecen en el texto.
12. Di si estas afirmaciones sobre el empleo de los tiempos verbales en el Romance es verdadera o falsa:
Retroalimentación
Verdadero
Retroalimentación
Falso
Retroalimentación
Falso
Retroalimentación
Verdadero
Retroalimentación
Verdadero
13. Muchos romances tienen final abierto, es decir, no sabemos cuál es el desenlace de la historia. De esta forma se logra mantener el interés del público. Escribe un final para este romance.